Primera piedra.

En un artículo comentaba las críticas que había recibido el logo de Telefónica realizado por CIAC debido a que no es muy evidente el acento en la grafía, lo que se interpretó como un atentado a la lengua. Recordemos las polémicas declaraciones de Gabriel García Márquez proponiendo “simplificar” el castellano.
Mi humilde contribución a la brutalidad global, desde este perdido rincón del planeta, es este logotipo. La verdadera razón para eliminar el acento es que me molestaba para que se “leyese” como la silueta de una ciudad. La excusa fue que está tomado de la película de Fritz Lang y en el idioma original se escribe sin tilde.
Que zaino, no?